La mamá de la pequeña Ellas quería remodelar la habitación de su hija. El hueco de la habitación era pequeño y se había enamorado de los armarios de “Kast van een Huis” inspirados en las casitas de las calles de Amsterdam, pero el precio de estos armarios era un obstaculo. Así que se puso manos a la obra para decorar la habitación infantil de su hija sin renunciar a los diseños tan bonitos que rondaban en su cabeza. Aquí teneis el resultado final, a partir de unas estanterías Billy de Ikea, les colocó unas puertas con forma de casitas hechas con tableros de DM, pintura y vinilos decorativos. Después de unos cuantos días y bastantes noches… ¡Ya está todo listo para recibir a la pequeña princesa!

Claro que si tienes un buen presupuesto y buen gusto para decorar la habitación de los peques puedes hacer maravillas, pero si  no es así, este ejemplo demuestra que con ganas, ideas y un poco de ingenio cualquier mamá o papá manitas puede hacer una habitación infantil de ensueño.

Fotos: Style Room