Hoy os mostramos un proyecto muy curioso y original, se trata de un complejo educativo ubicado en Tel Aviv (Israel), que aúna en una misma construcción seis guarderías distintas que funcionan de manera independiente. Consta de una zona común de juegos, unas oficinas para los servicios sociales y un centro de bienestar y psicología para niños. Todo ello se encuentra enmarcado en un gran espacio de 2400 metros cuadrados.
El diseño del centro educativo está inspirado en la rica historia agrícola de la población donde se sitúa, Shemaryahu Kfar. El principal objetivo al construirlo fue conectar a los niños con dichas raíces agrícolas gracias al diseño de formas orgánicas y simples y al uso de materiales como la madera contrachapada o la madera maciza.
Cada una de las seis guarderías se inspira, a su vez, en un tema de las 7 especies de Israel derivadas de la Biblia que simbolizan la fertilidad de la tierra, por lo que cada una recibe el nombre de una de las especies: Olive (Zayit), Palm (Tamar), Granada (Rimon), trigo (Hita), Fig (Te’ena) y Vine (Gefen). Estas especies determinan el carácter distintivo de cada una de las guarderías y además sirvió como un código de diseño: le aportó la paleta de colores y los motivos gráficos.
El vestíbulo se situa en la zona central y hace la función de una gran área de juegos común a todas las guarderías. El diseño de este gran espacio buscó fomentar la actividad física y la interacción entre niños, y está inspirado en el pueblo agrícola, de manera que encontramos diferentes áreas de juego como los tractores de madera, los lagos o los árboles. Tanto el interiorismo como el diseño de mobiliario del Centro Educativo de Shemaryahu Kfar fueron proyectados por la diseñadora de interiores Sarit Shani Hay.
