Aunque esta habitación originalmente no ha sido pensada para niños, me parece una buena fuente de ideas para decorar una habitación infantil donde los niños estudian, juegan y hacen manualidades. Un poco de pintura de un color bonito o incluso un papel pintado en la pared de la estantería quedaría perfecto y le daría a la habitación algo más de calidez. Un truco que siempre da resultado cuando no tenemos muy claro como decorar es comenzar por tonalidades blancas en paredes, mobiliario,… y finalmente dar las pinceladas de color con textiles, papeles pintados, vinilos, accesorios,… con los motivos y tonos que más te gusten. Si optas por una decoración más neutra, combina tu «look en blanco» con objetos y mueble auxiliar en madera, mimbre… o en tonos tostados. ¡ya veras que bien queda!.

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Vía: Decor8